El tipo de cola que luzca tu vestido de novia marcará la diferencia. Es un aspecto fundamental a tener en cuenta y su elección dependerá del tipo de boda y lugar de la celebración.
En Top Novia contamos en nuestra colección con vestidos de novia con colas de diferentes formas, largos y diseños que se adaptan a los gustos de todas las novias.
Con respecto a esta elección, nuestra recomendación es que las mujeres con curvas o de baja estatura no utilicen vestidos con cola larga, ya que acortan la figura y aumentan visualmente el volumen.
Seis tipos de cola para seis tipos de boda
Existen diferentes tipos de cola clasificadas por el largo de la misma. La cola real (de más de tres metros de largo) y la cola catedral (de más de metro y medio) son las más habituales en las bodas reales y para las novias más clásicas.
Sin embargo, son poco prácticas, dificultan la movilidad y requieren de una persona que ayuda en todo momento a la novia. Por ello, no son las más comunes.
La cola capilla tiene un metro y media de largo desde la cintura, es cómoda y fácil de llevar. La tendencia nupcial utiliza esta cola con una pulsera atada a la muñeca para que la novia puede recogerla y bailar y caminar fácilmente.
La cola de la corte solo tiene un metro de largo y es más discreta. También se encuentra la cola barrida de solo 30-50 centímetros. Ambas son ideales para bodas civiles, en la playa o al aire libre.
Las novias que quieren lucir un tipo de cola largo pero que no le impida disfrutar de la celebración escogen las colas desmontables.
Curiosidades del tipo de cola
La cola del vestido de novia es sinónimo de formalidad, es decir, se entiende que cuanto más larga más importante y formal es la boda. Por este motivo es normal no ver colas largas en bodas que se celebran en la playa o al aire libre.
Además de ser signo de formalidad, antiguamente la cola era un símbolo de estatus. Mientras más larga era la cola del vestido, se entendía que mayor era la riqueza de la novia.