Una de las primeras cosas en las que piensa una novia tras la pedida de mano es en su vestido de novia. Y es que para algunas novias esto es lo más importante de su boda e incluso tienen su vestido ideal ya en su imaginación.
Sin embargo, a la hora de elegir el vestido perfecto para ese día debes tener en cuenta varios factores como el tipo de tela que deseas, los complementos que quieres llevar o no, el color que quieres que tenga y, por supuesto, la forma del traje. Teniendo en cuenta este último aspecto existen determinados tipos de vestidos que se realzan la forma del cuerpo de cada mujer. Porque en el mejor día de tu vida quieres que todo sea perfecto y que tanto tú como tu vestido deslumbre ante todos. La mejor forma de conseguirlo es eligiendo el vestido que realce tu belleza única.
¿Qué vestido de novia es mejor para cada tipo de cuerpo?
Existen numerosas formas de diseñar un vestido de novia, pero los patrones clásicos siguen apuntando a cinco tipos de formas de cuerpo.
Forma de rectángulo: Las mujeres que tienen este cuerpo no tienen curvas ya que tienen todas las zonas con las mismas medidas. Por esta razón, es muy importante realzar con volados y brillos el vestido para poder dar forma y aportar movimiento. El tipo de vestido acorde a estas características suelen ser vestidos vaporoso, ajustados en la cintura con corsés y más amplios en la zona de la falda.
Forma ovalada o redonda: Las mujeres que tienen un cuerpo ovalado o redondo son aquellas mujeres que carecen de formas marcadas y tienden a tener unas caderas amplias. Para este tipo de novia, el vestido que más va a favorecerle es el de talle alto o corte imperio ya que se buscan diseños que alarguen la figura. En estos casos es mejor elegir un escote en forma de V o de corazón para distraer la atención de la zona más ancha del cuerpo.
Forma de triángulo invertido: Tener forma de triángulo invertido quiere decir que tu cuerpo es más ancho por zona de los hombros y más estrecho por las caderas. En este caso se trata de buscar la simetría del cuerpo equilibrando la zona inferior a la superior. Esto quiere decir que habrá que enfocar la atención en la zona de las caderas y esto se consigue sobre todo con el estilo Ball Gown. Este estilo se basa en llevar escotes cerrados con cinturas ceñidas y una gran amplitud en la falda para equilibrar la zona alta del cuerpo con las caderas y estilizar a la novia.
Forma de pera o triángulo: Las mujeres que tienen un cuerpo con esta forma tienen unas caderas más anchas que sus hombros. Por ello, el tipo de vestido que más realzará su cuerpo serán aquellos en A o corte imperio y los vestidos con escote en V que no sean muy ceñidos en al cintura. Se trata de focalizar la atención en la zona superior del cuerpo y desviarla de las caderas para equilibrar y estilizar el contorno. Además, las mangas te ayudarán también a estilizar la figura.
Forma reloj de arena: Las mujeres que tienen este tipo de cuerpo en forma de reloj de arena tienen curvas acentuadas. Esto se debe a que tienen la misma proporción en los hombros que en las caderas lo que proporciona unas bonitas curvas. Por esta razón las mujeres con este cuerpo no tienen ningún problema a la hora de elegir vestido ya que la simetría de su cuerpo hace que la mayoría de los diseños les sienten bien. Sin embargo, un diseño corte sirena o tipo tubo realzarán aún más las curvas de su cuerpo ya que suelen ser ceñidos en la cintura.
Si se acerca el día de tu boda y aún no has decidido qué vestido ponerte porque no sabes cuál se sentará mejor, puedes acudir a Top Novia. Te asesoraremos sobre qué tipo de vestido se adapta mejor a tu cuerpo para que brilles en tu gran día.